LO QUE REVELAN NUESTRAS HECES

Buenas y salsas. Continuamos en el camino de la alimentación consciente. Hoy hablaremos sobre un tema que impuso Narda Lepes la semana pasada, “Tu caca tiene que flotar. Si va al fondo, falta equilibrio, mas frutas y mas verduras”. Esta afirmación generó mucha polémica en los diferentes medios de comunicación y por eso hoy les quiero compartir un fragmento de mi quinto libro “Detené la diabetes”, escrito con Pablo de la Iglesia, donde hablamos sobre este tema tan importante para la calidad de vida.

El correcto funcionamiento intestinal se verifica cuando las heces son abundantes y consistentes. La evacuación debe ser diaria y con facilidad. Se considera normal una o dos veces por día, pero esto varía según las personas. La vigilancia en la regularidad en el movimiento del vientre es un punto clave a partir del cual comienza el camino de la salud.

La materia fecal puede ser un elemento de reconocimiento que devela el estado de salud de los intestinos y en general en todo el organismo. El color, el olor, la forma o la consistencia son mensajes que nos da nuestro cuerpo y pueden ser muy útiles para determinar la necesidad de algunos cambios en el estilo de vida.

Si las heces son muy estrechas como un lápiz o semejan a una cinta, pueden estar delatando un estrechamiento u obstrucción colónica. Las heces normales tienen un diámetro de tres a cinco centímetros; si son más anchas pueden develar falta de tono en la musculatura intestinal.

Si la materia fecal se hunde, puede contener minerales sin digerir o ser demasiado compactas por falta de humedad (lo cual puede solucionarse revisando nuestros hábitos de hidratación). Si flota completamente, refleja la presencia de grasa sin digerir o exceso de gas por fermentación. Idealmente deben flotar la mitad y hundirse la otra mitad.

En 1997 un equipo de gastroenterólogos de la Universidad de Bristol (Reino Unido) creó la Escala de heces de Bristol, una tabla para evaluar la consistencia y las formas de las heces  para verificar su normalidad.

Las mismas se califican en 7 tipos de clase de heces:

• Tipo 1: Se presentan como trozos duros, separados, como bolitas o nueces que son difíciles de pasar. Constituyen un signo de estreñimiento, deshidratación, toxemia y necesidad de atender la higiene intestinal, la alimentación y el estilo de vida.

• Tipo 2: Semejan “salchichas” abultadas. Si se presentan con frecuencia indican estreñimiento y deshidratación.

• Tipo 3 (Normal): También tienen forma de “salchicha”, pero con grietas en el exterior. Si consumimos más agua lograremos que las heces se suavicen y no tengan grietas exteriores.

• Tipo 4 (Normal): Estas evacuaciones saludables son suaves, lisas y salen en forma de una serpiente.

• Tipo 5: Si nuestras evacuaciones pasan rápidamente a través del sistema digestivo y parecen trozos de masa pastosa con bordes bien definidos, estamos ante una diarrea suave que puede reflejar desorden intestinal.

• Tipo 6: Si se presentan como fragmentos blandos y esponjosos con bordes irregulares, indican diarrea y necesidad de una limpieza intestinal.

• Tipo 7: Si las evacuaciones se presentan en forma líquida y sin partículas sólidas, estamos potencialmente ante una diarrea grave. Visite al médico sin pérdida de tiempo.

Espero que a partir de hoy tomen en cuenta estos consejos para tener calidad de vida. Para mayor información www.pablomartinchef.com o en mi quinto libro Detené la diabetes. Y recuerden que “somos lo que comemos, y lo que hacemos”. ¡Hasta la próxima!

 Pablo Martín. Chef – Periodista.

www.pablomartinchef.com