¿Por qué los argentinos comemos tan mal?

Secretos para una alimentación sana e inteligente.
 
:: Buenas y salsas gente linda. Para afirmar que nuestra alimentación es sana, debemos cumplir ciertos requisitos. No solo por decir “no consumo carne” ya estamos salvados. Según una encuesta realizada por la Fundación Favaloro, solamente el 5% de los argentinos consume diariamente las cinco porciones de frutas y verduras que aconseja la Organización Mundial de la Salud. Modas, costumbres y comodidad son algunos de los factores que muchos eligen para determinar su alimentación.
:: Mucha gente me escribe diciendo que eliminó las carnes rojas de su dieta diaria y se siente mucho mejor. Cosa que aplaudo de pie y me pone contento. Pero cuando me siguen contando un poco más, noto que no incorporan los suficientes nutrientes que cada organismo necesita. Según el doctor Jorge V. Salas, a grandes rasgos, “debemos ingerir de un 55 a 60% de cereales integrales, un 25% de frutas crudas y de verduras cocinas y crudas, un 10% de legumbres y de un 5 a un 10% de sopas, algas, condimentos y bebidas”.
:: Un dato alentador es que en nuestro país se disminuyó el consumo de carnes por las subas de precio y porque nos estamos dando cuenta lo mal que hace. Esto lo demuestra el informe de la Cámara Argentina de la Carne informando que en estos 10 meses del año, el consumo per cápita llegó a 56 kilos; en el mismo período del año pasado la marca superaba los 69 kilos. Pero lamentablemente a pesar de haber bajado el consumo, el argentino sigue excedido en la ingesta de carne y grasas saturadas, desconociendo que el ser humano es frugívoro por naturaleza.
:: Otros datos que arrojó la encuesta de la Fundación Favaloro es que el 35% de los argentinos consume pocas frutas y verduras. A mi entender, las razones no tendrían que ver con el gusto y menos con la economía ya que consumir frutas y verduras no es más caro que comer helados o golosinas. Lo que aconseja la Organización Mundial de la Salud es para los chicos una ingesta de 3 frutas y dos porciones de verduras diarias. Para los adultos la cuestión se revierte ya que tenemos que ingerir 2 frutas y 3 porciones de verdura. Recordemos que al cocinar los vegetales se pierden una parte importante de los nutrientes. Por tal motivo, te aconsejo un consumo diario de verduras crudas.
 :: Excusas para alimentarse mal hay millones: “no tengo tiempo”, “mi mamá me cocinaba siempre”, “estoy acostumbrado a esos sabores”, “la publicidad dice que… “, y tantas otras. La realidad es que el exceso de mala información y las promesas falsas de las publicidades lleva a que una persona crea que se está alimentando y en verdad lo que está haciendo es ingerir productos que al organismo le ocasionan a la larga enfermedades serias.
:: Mi consejo es volcarse a una alimentación sana e inteligente. Y para eso les preparé una ensalada súper nutritiva. Gracias por seguir eligiendo alimentarse con el corazón y no tanto con los ojos. Recuerden lo que decía Ohsawa: “la puerta es estrecha, pero del otro lado se encuentra el infinito”.
:: Pablito Martín. Chef – Periodista

:: Ensalada no muy salada


INGREDIENTES (4 porciones)
Espárragos                                         1 paquete
Espinaca                                             ½ paquete
Tomates secos                                 50 gramos
Remolacha                                        2 medianas
Levadura de cerveza en copos  2 cucharadas
Semillas varias                                  4 cucharadas
Aceite de oliva                                 4 cucharadas
Pimienta y sal                                   Cantidad necesaria
PROCEDIMIENTO
Cortá y limpiá los espárragos.
Limpiá la espinaca y cortala con las manos del tamaño que más te guste.
Poné en un bol a hidratar los tomates secos con agua hirviendo (solo cubrí la superficie). Una vez hidratados, colalos y cortalos finitos.
Pelá y rallá la remolacha como si fuera una zanahoria.
Tostá las semillas y molelas.
Cociná los espárragos preferentemente al vapor (6 minutos) o hervilos (3 minutos). Luego cortalos del largo de dos dedos y sellalos en una sartén con un chorrito de aceite.
Poné todos los ingredientes en un bol grande, condimentá con pimienta, sal, levadura de cerveza y aceite de oliva.
:: Pablito Martín. Chef – Periodista

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