:: ¿Sal refinada, marina o de roca?
Buenas y salsas gente linda. Continuamos en el camino de la alimentación consciente. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) diariamente se pueden consumir hasta 5 gramos de sal por día, pero en promedio los argentinos ingieren 12 gramos. Por eso es que hoy nos dedicaremos a investigar este condimento.
En la antigüedad, la sal tenía un gran valor para los seres humanos. La palabra “salario” proviene del latín “salarium”, que significa “ración de sal”. Por ejemplo, los romanos la utilizaban como moneda de cambio, prefiriendo la sal antes que el oro. Claro, en esa época utilizaban la sal para conservar los alimentos y de ahí que ellos decían: “sin oro y con sal podemos sobrevivir varios años”. Por eso es que en varios libros de historia la denominan como “el oro blanco”. Pero, ¿qué paso entonces para que muchos la tengan como una mala palabra?
Varios especialistas afirman que “el exceso de sodio es uno de los factores principales de la hipertensión arterial”. La sal pura está formada por dos minerales (39,34% de sodio y 60,66% de cloro). Cada gramo de sal de mesa contiene 400 mg de sodio y para que entiendas, nuestro cuerpo necesita entre 500 a 1500 mg de sodio. Pero ojo que este mineral no solo lo encontramos en la sal, sino también, en grandes cantidades, en la mayoría de los productos industrializados (para realzar el sabor y conservarlo más tiempo) y en los vegetales, en menores proporciones. La cuestión es que los argentinos consumen un 140% más de lo recomendado por día y luego de varios años a muchos de ellos le detectan hipertensión.
La Fundación Cardiológica Argentina (FCA) señala en su página web (http://www.fundacioncardiologica.org/) que la hipertensión puede ser un asesino silencioso. Por eso sería bueno entender qué tipo de sal es aconsejable consumir (moderadamente):
-Sal de mesa refinada: Ha sido artificialmente reducida a dos elementos: cloro y sodio.*-**
-Sal marina: Posee 88 elementos (86 oligoelementos) en forma natural.*-**
-Sal de roca: Posee 94 elementos (92 oligoelementos) en forma natural.*
*Ver tabla completa de elementos en mi web. ** Por ley se la enriquece.
En los últimos dos casos, el sodio y el cloro son los principales elementos en cuanto a la cantidad, representando del 86% al 90% de su composición. Pero la importancia que se le atribuye de ese 10% al 14% es verdaderamente extraordinaria. Por eso creo que a la hora de elegir el tipo de sal, es fundamental tener en cuenta estos datos.
:: Condimento para reemplazar la sal
INGREDIENTES
Alga nori: 2 láminas
Semillas de sésamo: 50 grs
Cúrcuma: 2 cucharadas
Levadura de cerveza en copos: 2 cucharadas
PROCEDIMIENTO
Tostá las semillas.
Cortá el alga nori en pedacitos y tostalos ligeramente en una sartén sin aceite.
Poné todos los ingredientes en el vaso del mixer y procesá hasta obtener un polvito. Si no tenés mixer ponelo directamente en una licuadora o en un mortero.
Consejo gauchito: Como dice el título, podés utilizar este condimento en cualquier receta de este libro para reemplazar la sal.
Receta extraída del libro “Con probar no perdés nada”. Editorial: TETRAEDRO.
:: Condimento campestre
INGREDIENTES
Semillas de sésamo: 3 cucharadas
Semillas de girasol: 3 cucharadas
Cúrcuma: 2 cucharaditas
Romero seco: 2 cucharadas
Tomillo seco: 3 cucharadas
Provenzal: 3 cucharaditas
Aji molido: 2 cucharaditas
Pimienta: 1 pizca
PROCEDIMIENTO
Tostá las semillas en una sartén (por separado), pero en este caso no las remojes porque necesitamos que estén secas.
Poné todos los ingredientes en un mixer o licuadora y procesá hasta que se triture (30 segundos).
En la antigüedad, la sal tenía un gran valor para los seres humanos. La palabra “salario” proviene del latín “salarium”, que significa “ración de sal”. Por ejemplo, los romanos la utilizaban como moneda de cambio, prefiriendo la sal antes que el oro. Claro, en esa época utilizaban la sal para conservar los alimentos y de ahí que ellos decían: “sin oro y con sal podemos sobrevivir varios años”. Por eso es que en varios libros de historia la denominan como “el oro blanco”. Pero, ¿qué paso entonces para que muchos la tengan como una mala palabra?
Varios especialistas afirman que “el exceso de sodio es uno de los factores principales de la hipertensión arterial”. La sal pura está formada por dos minerales (39,34% de sodio y 60,66% de cloro). Cada gramo de sal de mesa contiene 400 mg de sodio y para que entiendas, nuestro cuerpo necesita entre 500 a 1500 mg de sodio. Pero ojo que este mineral no solo lo encontramos en la sal, sino también, en grandes cantidades, en la mayoría de los productos industrializados (para realzar el sabor y conservarlo más tiempo) y en los vegetales, en menores proporciones. La cuestión es que los argentinos consumen un 140% más de lo recomendado por día y luego de varios años a muchos de ellos le detectan hipertensión.
La Fundación Cardiológica Argentina (FCA) señala en su página web (http://www.fundacioncardiologica.org/) que la hipertensión puede ser un asesino silencioso. Por eso sería bueno entender qué tipo de sal es aconsejable consumir (moderadamente):
-Sal de mesa refinada: Ha sido artificialmente reducida a dos elementos: cloro y sodio.*-**
-Sal marina: Posee 88 elementos (86 oligoelementos) en forma natural.*-**
-Sal de roca: Posee 94 elementos (92 oligoelementos) en forma natural.*
*Ver tabla completa de elementos en mi web. ** Por ley se la enriquece.
En los últimos dos casos, el sodio y el cloro son los principales elementos en cuanto a la cantidad, representando del 86% al 90% de su composición. Pero la importancia que se le atribuye de ese 10% al 14% es verdaderamente extraordinaria. Por eso creo que a la hora de elegir el tipo de sal, es fundamental tener en cuenta estos datos.
Espero que a partir de ahora tengan en cuenta estos datos. Recuerden que "somos lo que comemos, y lo que hacemos". ¡Hasta la próxima!
Pablito Martín. Chef – Periodista
www.pablomartinchef.com.ar
www.productospm.com.ar
:: Condimento para reemplazar la sal
INGREDIENTES
Alga nori: 2 láminas
Semillas de sésamo: 50 grs
Cúrcuma: 2 cucharadas
Levadura de cerveza en copos: 2 cucharadas
PROCEDIMIENTO
Tostá las semillas.
Cortá el alga nori en pedacitos y tostalos ligeramente en una sartén sin aceite.
Poné todos los ingredientes en el vaso del mixer y procesá hasta obtener un polvito. Si no tenés mixer ponelo directamente en una licuadora o en un mortero.
Consejo gauchito: Como dice el título, podés utilizar este condimento en cualquier receta de este libro para reemplazar la sal.
Receta extraída del libro “Con probar no perdés nada”. Editorial: TETRAEDRO.
:: Condimento campestre
INGREDIENTES
Semillas de sésamo: 3 cucharadas
Semillas de girasol: 3 cucharadas
Cúrcuma: 2 cucharaditas
Romero seco: 2 cucharadas
Tomillo seco: 3 cucharadas
Provenzal: 3 cucharaditas
Aji molido: 2 cucharaditas
Pimienta: 1 pizca
PROCEDIMIENTO
Tostá las semillas en una sartén (por separado), pero en este caso no las remojes porque necesitamos que estén secas.
Poné todos los ingredientes en un mixer o licuadora y procesá hasta que se triture (30 segundos).
Pablito Martín. Chef – Periodista
Gracias!!! Pero entonces cual me recomiendas...soy hipertensa, tengo 53 años. Cariños
ResponderEliminarEl problema de la hipertensión arterial no contraindicaría ninguna sal, pero sí debería moderar las cantidades a no más de 2 gr diarios.
EliminarPablo, o sea que a todas les agregan cloro y sodio? No existe una sal (marina o de roca) que no esté modificada y que sea sana?
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